Columna del profesor Pablo Barros: “La responsabilidad de preservar nuestro patrimonio”

pablo-barrosÚltimamente hemos visto que se han instalado sendas piletas, además de jardineras, en las áreas verdes del Campus Casa Central de nuestra universidad. En mi opinión, hay un desacierto muy grande en esta acción específica, ya que -probablemente sin intención- se atenta contra la originalidad de una obra de arquitectura, reconocida transversalmente por su valor arquitectónico y paisajístico.

En este sentido, vale la pena recordar que nuestro campus recibió el Premio Obra 2008, distinción otorgada por la Comisión Bicentenario Chile 2010, reconociendo a la Casa Central USM como una de las 18 edificaciones que se han transformado en un hito urbano. Lo anterior, en su momento, se festejó de manera entusiasta por nuestra comunidad, pero pocos avizoraron la responsabilidad que ello implicaba. Somos custodios de una obra valiosa y debemos -en consecuencia- actuar con cautela y de manera informada a la hora de proponer modificaciones en nuestro campus, lo que -desde luego- incluye los jardines.

Pretender imitar el pasado en el presente es un tema teórico de antigua data en la arquitectura. A este dilema se enfrentaba Brunelleschi al tener que diseñar la cúpula de la catedral de Santa María del Fiore (1420/1436), cuyo estilo original era el gótico toscano. ¿Qué hacer: imitar lo antiguo, diseñar algo totalmente nuevo rompiendo con el pasado o algo nuevo integrándose al pasado? Instalar objetos fuera de tiempo y lugar en un jardín patrimonial pertenece al mismo tipo de debate.

columna-piletas-usmMe referiré en este caso tan solo a las piletas. Estas tienen dos componentes: la fuente o plato contenedor del agua, de data aproximada 1940 y que acusan una clara influencia Bauhaus; que en este caso son de lo que se denomina localmente como mármol reconstituido, el que consiste básicamente en una argamasa de cemento blanco, arena y partículas de cuarzo. A lo anterior se ha sumado una figura a base de fibras plásticas que imita a figuras humanas de carácter renacentista. La pregunta que cabe a continuación es: ¿Qué hace una pileta que simula un objeto renacentista en un jardín botánico de inspiración gótica?

Seguramente parte del argumento utilizado en estos casos -para justificar las obras- dice relación con la intención de embellecer nuestras instalaciones. Vale la pena entonces reflexionar un poco en torno a la idea de belleza y -para este caso- recordar la idea platónica, más tarde revalorizada por San Agustín, de que “la belleza es el esplendor de la verdad”. ¿Puede ser entonces bello un objeto falso, de plástico, que imita a un original en mármol y que se instala con el telón de fondo de una arquitectura neogótica escolástica?

En mi opinión: simplemente no y, para ser más expresivo aún, el resultado es un engendro espantoso.

Me he animado a llamar la atención acerca de este tema, ya que -de lo expuesto- se deduce cuán laxos hemos sido en el cuidado y preservación de nuestro patrimonio, coincidiendo con la falta de conciencia nacional en este tema.

Luis Pablo Barros Lafuente
Profesor Departamento de Arquitectura

* Las opiniones vertidas en este espacio son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten, y no representan necesariamente el pensamiento del Departamento y la Universidad.

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María Cirano

Chile 🇨🇱
Arquitecta y Fotógrafa

El Ingeniero Comercial USM realizó un MBA en Control de Gestión en el Institut Léonard de Vinci.

Andy Carreño, Ingeniero Comercial de la Universidad Técnica Federico Santa María conoció a su actual señora -de nacionalidad francesa- en nuestra Casa de Estudios. Por ello, decidió emigrar a Francia, donde estudió un MBA en Control de Gestión en el Institut Léonard de Vinci. Cabe destacar, que en su época universitaria realizó una pasantía en La Bocconi, universidad ubicada en Milán.

Andy el 2016 decidiste comenzar una nueva vida en Francia, ¿cómo surgió esta idea y por qué en aquel país?

“En mi época universitaria me fui de intercambio a La Bocconi, universidad ubicada en Milán. Me enamoré de Europa y siempre quise volver. Además, conocí a mi actual señora francesa quien se encontraba de pasantía en la Universidad Técnica Federico Santa María.

Luego de finalizar mis estudios, decidí emigrar a Francia para estar con ella. No obstante, la gran dificultad de este cambio de vida ha sido el idioma aunque éste ha mejorado año tras año. Cursé una formación intensiva para aprender francés y posteriormente trabajé en una start up lo que me permitió obtener un mejor nivel escrito y oral de la lengua. Además, realicé un MBA en Control de Gestión en el Institut Léonard de Vinci.

Vivir en el extranjero ha sido una gran experiencia. Me reúno con una comunidad de chilenos para eventos claves, como lo son las Fiestas Patrias. También, los franceses me han acogido muy bien en los trabajos y han sido empáticos con mi llegada”.

Volviendo al pasado, ¿por qué decidiste estudiar en la Universidad Técnica Federico Santa María? ¿qué valoras de ser un exalumno de nuestra Casa de Estudios?

“Nací en Valparaíso y gran parte de mi familia estudió en la Universidad Técnica Federico Santa María. Por ello, decidí ingresar a dicha Casa de Estudios. Su prestigio e historia, la hace aún más única.

Por otra parte, me siento orgullo de ser parte de la comunidad sansana. He visto bastantes reportajes de exalumnos y de académicos que se destacan en un área en particular. Tengo excelentes recuerdos y lo que más me fascina es la infraestructura del edificio emblemático del Campus Casa Central Valparaíso.

La USM me entregó una formación sólida que nos lleva a ser excelentes profesionales, donde encontramos soluciones a todos los problemas. Además, contamos con una tremenda capacidad de adaptación”.

Por otra parte, estudiaste un MBA en Control de Gestión en el Institut Léonard de Vinci ¿cómo calificarías dicha experiencia?

“Fue una gran experiencia estudiar un MBA en Francia, donde mi objetivo fue conocer las finanzas internacionales y francesa. Allí conocí muchas personas de múltiples culturas e hice grandes contactos”.

 

Finalmente, ¿cómo te ves de acá a cinco años más? ¿cuáles son tus proyecciones profesionales?

“Me gustaría relacionarme más con la agricultura francesa. Además, mi proyecto a mediano plazo es ser asesor financiero de dicha industria en este país”.